PRECIOS DEL PESCADO Y LA NUEVA LEY DE INSOPESCA
Desde hace años venimos observando el comportamiento errático y multimodal de los precios del pescado, una imposición de precios por un mercado muy versátil, pero con unas evidentes ansias de ganancias.
No podemos proyectar cual será la conclusión o los precios finales, una vez instalada o acoplada completamente el nuevo decreto con fuerza de ley y nuestro objetivo no redunda en la simple critica de un sentimiento de hacer algo, para poder cambiar la realidad alimentaria del venezolano, si no observar los pro y contras desde una óptica técnica y profesional.
El preámbulo del decreto con fuerza de ley, si bien es cierto que recoge una vivencia del pescador venezolano, no es menos cierto, que se mezclan muchos términos románticos que desdibujan la esencia del pescador como un pequeño comerciante, que muchas veces regresa de la mar sin pesca y que recoge unas pata e ´cabras (pepitonas) para el guiso del día. El término “pa´ la olla”, acción por la cual el pescador dona, regala algunos ejemplares de poco valor o sardinas que sobraron de la carnada. No puede ser comparado un hecho natural de bondad o ser social, con un alícuota o impuesto del 5 % de la pesca, sea cual sea su origen (artesanal, comercial o industrial), y la razón primordial por la cual no es inaplicable, es porque desde que el pescador sale a la mar, ese pescado ya tiene unos costos fijos ( Gasolina, aceite, mantenimiento de redes y artes de pesca, etc.) y se le adiciona un costo variable que es el esfuerzo de pesca, índice importante en el precio del pescado y que varia, según las horas o días que esa plantilla de pescadores pesquen y la tecnología utilizada.
Desde esa perspectiva existen 2 perfiles:
· En la pesca industrial y comercial existe un menor esfuerzo de pesca pero un mayor costo en tecnología.
· En la pesca artesanal presenta mayor esfuerzo de pesca pero menor tecnología
El punto donde se encuentran estos 2 perfiles, son en las condiciones ambientales, tipo de pesca, especies, localidad, batimetría, tipo de lecho marino, entre otros, es decir es imposible exigir una común alícuota de donación sin romper con los términos de equidad y justicia enarbolados por el Estado.
Es nuestro parecer que la nueva ley no fue elaborada por personas que incursionan diariamente en el sector pesquero y acuícola, vendieron a nuestro presidente un dolor de cabeza, enmascarando una excelente decisión, (Eliminación de la Arratropesca) con una donación imposible de ejecutarse, la cual no tiene una base social sustentable.
El solo hecho de dar directa y gratuitamente el 5% de la pesca, lo hace de un término ambiguo y además que el Estado para mantenerlo inocuo al consumo humano, tiene que utilizar insumos (hielo, agua potable, infraestructuras) y debe tener un personal capacitado para el manejo del pescado.
Si se comienza a improvisar con este tema, bien explícito en la ley, El Estado más allá de demostrar su inoperancia en la práctica, del manejo del recurso pesquero y acuícola, demostraría aun peor su incapacidad de legislar un recurso natural renovable, hoy considerado recurso finito, debido a la sobrepesca mundial.
Como decían 2 grandes amigos, el Dr. Mauro Pellegrini y el Dr. Mauricio García, que Venezuela no escapa de esa problemática mundial y con frecuencia vamos a observar la Extinción Comercial de las especies de mayor presión pesquera en Venezuela.
Este término algunos biólogos no nos gusta encararlo, sin embargo podemos observar, por ejemplo en la Feria de La Sapoara, la desaparición de ejemplares de tallas comerciales y que estas sapoaras (Semaprochilodus laticeps) son traídas de la cuenca del Apure y comercializados en dicha Feria.
Cuanto pescado aproximadamente es el 5% de la pesca nacional?
Si las cifras de producción del 2007 (Inapesca) es de 267.000 Ton/año, supongamos que omitimos algunos detalles como pescadores mayores de 60 años (No existen muchos, debido a lo exigente de la pesca artesanal, generalmente se queda tejiendo redes y reparando los botes), Pesca artesanal de sustento ( ya que ella no es contabilizada debido a que es de consumo local) el 5% de 267.000 Ton: son 13.350 Toneladas/año de pescado. Esa cantidad representa un poco más de la mitad de toda la acuicultura de Venezuela en ese mismo año, Representa además casi la totalidad de la pesca de arrastre reportada, es decir el Estado Venezolano, deberá contar con suficiente infraestructura para mantener el pescado en estado optimo, el cual según nuestra visión es de imposible ejecución.
Creemos que el concepto está bien concebido pero mal planteado, el Estado debe crear mecanismos para recaudar el donativo en metálico, a su vez crear una institución con 2 fines:
· Apalancamiento financiero a pescadores y piscicultores
· Servicios sociales a pescadores
Donde los consejos comunales tengan participación en la junta directiva de la institución, está a su vez creará y realzará los valores socialistas, en la creación de Empresas de producción Social. Estas instituciones serán de limitada jurisdicción, es decir será conformada por un número estimado de pescadores para hacerla sustentable.
El Estado a través de ella colocará el capital semilla que deberá crecer tanto por los aportes de los donantes como de los préstamos que otorgue, ella podría ser la interlocutora ante el IVSS para incorporar a todos los pescadores de su plantilla.
Actualmente observamos a instituciones como la CVA carnes y pescados, la cual está inserta en la plataforma alimentaria del Estado Venezolano y que es la única institución que en la práctica podría asumir el control de la comercialización de los recursos pesqueros y acuícolas, sin embargo podemos acotar que a ella le falta personal técnico, infraestructuras y capacitación en todos los órdenes (Aseguramiento de la calidad, administrativo, gerencial, tecnología de alimentos).
Otra problemática recurrente y que los directivos de la antigua INAPESCA colocaron un pañito caliente durante 10 años, fue la captura de especies ornamentales, tipificada dentro de la actual y la derogada ley, pero inaplicada en la práctica.
Inapesca como ente rector de la actividad cerraba y cierra los espacios de las pequeñas y medianas empresas exportadoras de peces ornamentales venezolanos, considerados por diversos motivos, entre ellos los ambientales. Sin embargo vemos que empresarios de Colombia conjuntamente con empresarios venezolanos, se llevan nuestras especies por Puerto Carreño, sin que el Estado Venezolano emita alguna directriz.
Es de pensar que existen mafias internacionales del comercio de ornamentales, la cual explotan a nuestros indígenas y recursos naturales.
Más allá del comercio que representa ese recurso, el modo indiscriminado de pesca, la falta de autoridad en el sitio y el inexistente desarrollo de proyectos sustentables incorporando a la comunidad, hacen de esta actividad una pérdida de recursos biológicos y es posible que la extinción biológica de algunas especies, como es el caso de las especies colombianas.
La tesis del Estado Venezolano consiste en restringir las permisologías, asegurando la no intervención de estos recursos ícticos, posición no del toda cierta, ya que, pescadores furtivos nacionales e internacionales acaban de forma indiscriminada con este recurso.
Por ello somos de la creencia que si le damos capacitación a los indígenas Venezolanos en las orillas de las cuencas del Rio Orinoco y sus tributarios, en referencia a pesca y reproducción de peces ornamentales, haremos de ellos los vigilantes locales de sus recursos y estableceríamos un sentido de pertenencia, poco arraigados en las etnias Jivi, Kurripaco, entre otras asentadas en la localidad.
SECTOR TRANSPORTE:
El sector transporte, una actividad conexa de la pesca y acuicultura, es otro caso de nuestra atención.
Hemos visto que en todas o casi todas las alcabalas de Venezuela, el transportista deja como regalo, donación o en último caso por exigencia del efectivo a cargo de la supervisión de la cava transportista, algo del producto para la unidad que supervisa, esto es la puerta de entrada a fomentar la corrupción e inclusive el Narcotráfico, que opera al Oriente y Occidente Costero de nuestro país.
En el 2002 y hasta el 2004, la Empresa Sur Oriente de Alimentos, C.A., instaló un sistema de seguridad de su cava con precintos de plomo, que se instalaban en la ciudad de origen de la carga, es decir Carúpano, y al pasar por las alcabalas naturales, el efectivo de la Guardia Nacional, supervisaba, la guía y el precinto. En tal caso, que el efectivo crea conveniente abrir la cava, tendrá la potestad de hacerlo, pero le colocará otro precinto y notificará como novedad tanto en la guía expedida por INSOPESCA, como en el libro de novedades de la Alcabala en curso. Al final del viaje, se debe revisar los precintos, en la unidad local de la GN.
Este sistema aunque novedoso, no conto con la participación activa de la GN, sin embargo le daba la seguridad a la empresa que solo se transportaba pescado y no otro rubro NO AUTORIZADO.
PESCADORES:
Como podría Insopesca captar un donativo, en donde el que dona, no tiene un puerto fijo?
Esta pregunta habría que considerarla antes de implementarse este dispositivo de la ley donde el 5% de la pesca de dona directa y gratuita.
Existen muchas referencias al caso, un ejemplo de ella, la experimento Inapesca que debido a la informalidad del sector, se hace imposible empadronar todas las embarcaciones y pescadores.
Ahora bien, según lo citado y la amarga experiencia que vivieron los residentes de Ciudad Guayana en el 2007, donde se expendió pescado en mal estado, producto de las mareas rojas, por lo cual Inapesca (la cual debo felicitar), no tan rápidamente retiró del mercado de Chirica, gran cantidad de pescado en mal estado y otro con su presunción, pero se tomo todo el espacio muestral, para no correr riesgos de salud con grandes pérdidas económicas al sector.
Esto nos lleva a la conclusión que el Estado debe tomar acciones sobre la Seguridad Alimentaria, en la comercialización de pescados y no correr después de una intoxicación masiva. En Europa es común ver las bioetiquetas para que el consumidor tenga la seguridad y certeza del origen de ese producto y que por cualquier circunstancia, el organismo de salud podría identificar el lote que presenta problemas.
Como plantear en Venezuela una acción similar, pero enmarcado en la realidad criolla?
Según nuestra opinión. Lo ideal sería que todas las embarcaciones fuesen registradas en Insopesca, después de ello, la venta de ese pescado a los Caveros, deberá aunque sea informalmente, presentar en una factura, donde describa la especie, n° kilos, matricula de embarcación (arsk-xxx, arsh-xxxx, etc.). Esto se consideraría como registro de origen. Luego en la planilla de Insopesca, deberá contar con ese ítem.
Pero para que debería registrar eso? Es simple la respuesta, toda la pesca que tenga de origen dicha embarcación podría hacérsele un seguimiento rápido, en menos de 12 horas podría Insopesca tener en su poder el producto sospechoso, sin afectar la cadena natural de comercialización en Venezuela ni despertar falsas expectativas de la comunidad.
Estas son algunas consideraciones a ser presentadas a la nueva ley, aunque enfocándonos en los detalles operativos existen un sinnúmero de datos relevantes para la implantación de la ley.
En conclusión, nos observamos muchas debilidades, y nos incluimos porque somos parte de la cadena productiva de la pesca y acuicultura. Razón por la cual nos otorga el deber ciudadano, de manifestar nuestras inquietudes y plantearlas técnicamente.
No hay comentarios:
Publicar un comentario