Exótico o autóctono, he allí el dilema…

Los profesionales y técnicos en el sector alimentos, hemos tenido que obtener conocimientos adicionales en muchas disciplinas relacionadas en el área, utilizando la capacitación formal o empírica.
En la actualidad esto no representa una usurpación de objetivos o alcances de la profesión, tengo la certeza que ese complemento hace del tecnólogo en alimentos un profesional integral y respetuoso, no solo de las legislaciones de alimentos si no de las ambientales.
Lo que considero más difícil al producir un alimento, es tener una visión empresarial, responsabilidad para con los consumidores, el ambiente y el respeto a las normas y regulaciones sanitarias o de alimentos. Todo esto nos resume que el alimento a producir debe ser:
1. Inocuo
2. Nutritivo
3. De amplio target ( todas las clases sociales)
4. Económicamente sustentable
5. Ambientalmente sustentable
6. De características organolépticas especificas para un grupo de consumidores.(buen sabor, buen olor, buen gusto, buen aspecto)
7. Características de empaque atractivas y que sea optimo como barrera entre el medio y el alimento.
8. Que se produzca en el país o que obtenga un alto Valor Agregado Nacional (VAN)
9. Afinidad comercial y producto sustitutivo en caso de una arraigada costumbre alimentaria.
Estos son algunas de las consideraciones que podríamos tomar, no las enumero todas porque resultaría tedioso y no es el tema central de esta oportunidad.

El dilema es que materia prima utilizar...

Entonces tenemos que evaluar recursos autóctonos y exoticos.
Paseandonos por internet nos encontramo con este trabajo: Riesgos del Cultivo de Tilapias en Venezuela (http://www.interciencia.org/v27_01/nirchio.pdf) pueden revisarlos ustedes mismos.

Aunque no dudamos de su experticia como biologos, de la universidad venezolana a que pertenezcan, existen algunas incongruencias en sus planteamientos o falta de información de las revisiones bibliograficas citadas.
El argumento principal es que la tilapia es una especie muy peligrosa ambientalmente, sin embargo esa peligrosidad, es tal cuando introducimos sin ningun protocolo y visión, cualquier especie vegetal o animal al país.
Nos preguntamos quien fue el inconciente y a que institución pertenecía el que realizo tamaño impacto en lagunas los patos con la introducción de esta especie?
En mis continuos viajes de negocios por el Oriente del país, pude constatar tales hechos, inclusive los lugareños les tienen un nombre: La Universitaria.
Resulta curioso, el hecho. Sin embargo para no levantar suceptibilidades, no es la antigua Inapesca solamente la culpable...
Señores debemos reconocer nuestros errores y repararlos. No realizar Santas inquisiciones para hacernos más devotos.
Y no considero ese trabajo de punto de inicio para el cultivo de tilapias en Venezuela, porque insta al Estado y a las comercializadoras a ser cautelosos como no lo fueron algunas instituciones no gubernamentales en el pasado.

Es que los pasivos ambientales los tienen que pagar los ultimos de la fila?, empresarios que si tienen responsabilidad ambiental?

Lo cierto es que una finca con buenos sistemas de biocontroles y asistencia técnica, puede producir excelentemente esta especie, en el marco de las regulaciones nacionales.

No les comento más, porque evito extenderme y que el lector pierda el ínteres.